Princesas y Piratas

Publicidad que me llega en estos días a casa

La publicidad con imágenes fotográficas

Parece que no ha pasado nada de tiempo desde que defendí mi tesis doctoral allá por el año 2002. En una parte de la tesis reflexionaba acerca de la cuestión de género desde lo visual y explicaba cómo lo femenino era siempre utilizado como secundario, inferior, degradado. Pues bien, es como si no hubieran cambiado nada las cosas, pero lo más irritante, a nivel cultural, es que la publicidad utilice un discurso igualitario para formalmente hacer lo opuesto. 

Estas imágenes que acompañan, de la publicidad de un producto financiero, presumen de romper esquemas y de utilizar un lenguaje igualitario y no sexista, pero la realidad es distinta.

El lema "Las niñas, princesas- Los niños, piratas" no se corresponde con la imagen fotográfica, que supuestamente rompe el esquema, con un nivel de iconicidad mayor. La cultura visual delata. Fijaros. Entendemos que el niño es el de la izquierda y la niña la de la derecha, por imitación del diagrama de arriba, pero verdaderamente se trata de dos imágenes absolutamente andróginas. La corona del supuesto niño no parece de princesa particularmente, podría ser de rey. Y la criatura piratesca de la derecha, podría ser también un niño. Una vez más lo masculino triunfa, es decente, no es ridículo, y nos lo podemos tragar como un lenguaje igualitario. Pero tiene trampa, es mentira. Lo femenino sigue tratándose como inferior. Imaginaros a un niño de ocho años vestido de princesa, simplemente con una corona princesil absolutamente llena de adornos y velos ¿qué tal?

¿Los personajes mediáticos también están en el juego?

Efectivamente era un lapsus inconsciente, recibo la publicidad con el error
tipográfico corregido. Lo femenino se había impuesto desde lo inconsciente que
suele compensar